17 de octubre de 2024

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Beatriz

por Sofía Muñoz

Ojos mansos, manos marchitas,
dime cuál es tu preocupación,
cuál es tu pecado desvendado

Ojitos de calumnia.
Tus manitas, ojos mansos,
se cubren de tierra y de pudor.
Empápalas:

cuando te entierren
los gusanos se alimentarán
de tu amor.

Ojitos de miel, carita de luna,
acaríciame el pelo una vez más
con tus dedos magullados
tan ásperos como mi alma

Te has ganado la vida,
y la vida me ganaré por ti.

Tu presencia,
blanca y redonda,
ronda las calles como perro sin casa,
muerdes o ladras?

Bendíceme, oh santa presencia,
Con tus manos borroñosas y frágiles,
que su bendición me salvará.